
Homenaje al General Lázaro Cardenas
Serigrafías 13 / 75, 77 x 56 cm
Exilio republicano español 1936 a 1939
Registro
1981
No fui consciente de lo que Lázaro Cárdenas había hecho, por mis padres y por muchos otros republicanos españoles, hasta años después de mi llegada a México.
No fui consciente de lo que significaba vivir en el exilio, lejos de una patria donde la justicia había sido pisoteada y arrastrada por el fascismo.
Yo era demasiado pequeña cuando llegué a México para darme cuenta del dolor que representaba todo esto. Supe más tarde que Lázaro Cárdenas era el hombre que había dado una segunda patria y una nueva nacionalidad a los refugiados españoles. A mí me dio la única que he tenido siempre, pues la otra, la española, la había perdido antes de ganarla.
El respeto y la admiración que siento hoy por el general Lázaro Cárdenas, me los enseñó mi padre, como me enseñó a creer en las causas justas, en la voluntad de los pueblos por luchar y defender el derecho a vivir con dignidad.
El homenaje que hoy hago a este gran estadista, Lázaro Cárdenas, se lo dedico a mi padre, que sigue enseñándome a ver y a entender.
Marta Palau
México, D. F., 18 de marzo de 1981